Los arrecifes de coral de todo el mundo se han visto sometidos a un estrés térmico sin precedentes desde principios de 2023. Un nuevo informe revela que el blanqueamiento de los corales relacionado con el calor ha dañado los corales en más de 80 países, lo que lo convierte en el evento de blanqueamiento más extenso jamás registrado, sin un final claro a la vista.

Entre enero de 2023 y abril de 2025, el estrés térmico impactó al 84 % de los arrecifes de coral de todo el mundo, desde el Arrecife Mesoamericano en el Caribe hasta los llamados supercorales en el Mar Rojo, una zona que antes se creía resistente a los daños provocados por las temperaturas extremas.
“El hecho de que este último evento de blanqueamiento de corales a escala global aún esté en curso lleva a los arrecifes del mundo a aguas desconocidas”, dijo en un comunicado Britta Schaffelke, coordinadora de la Red Global de Monitoreo de Arrecifes de Coral.

Los científicos confirmaron oficialmente el evento de blanqueamiento en abril de 2024, lo que lo convirtió en el cuarto evento mundial de este tipo desde 1998. Se produce poco después del tercer evento de blanqueamiento mundial que acabó solo seis años antes, en 2017, e impactó al 68 % de los arrecifes de coral. El corto plazo de recuperación entre eventos dificulta que los corales se reconstruyan adecuadamente.
El blanqueamiento de los corales ocurre cuando las temperaturas del agua se vuelven demasiado cálidas y los corales expulsan las algas multicolor que viven dentro de ellos y deja a los arrecifes de un blanco fantasmal. Miles de peces y otras especies marinas se quedan sin un hábitat seguro. Estos ecosistemas vibrantes albergan aproximadamente una cuarta parte de toda la vida marina en algún momento de su ciclo de vida.

“El blanqueamiento es siempre espeluznante, como si una nevada silenciosa hubiera descendido sobre el arrecife, por lo general hay una ausencia de peces que aletean por su alrededor y una ausencia de colores vibrantes en el arrecife”, dijo en un comunicado Melanie McField, científica del Smithsonian que dirige un programa de monitoreo de corales para el Arrecife Mesoamericano.
Los océanos absorben aproximadamente el 90 % del exceso de calor del cambio climático impulsado por las emisiones de combustibles fósiles. Como resultado, las aguas se han ido calentando con cada década que pasa. En 2024, el mundo fue testigo de las temperaturas medias de la superficie del mar más altas jamás registradas, 0.6 °C (1.1 °F) por encima de la base de referencia de 1981-2010.

“La magnitud y el alcance del estrés térmico son impactantes”, añadió McField. “Algunos arrecifes que hasta ahora habían escapado en gran medida al estrés térmico y creíamos que eran de alguna manera resistentes sucumbieron a mortalidades parciales en 2024”.
Para Peter Thomson, enviado especial del secretario general de la ONU para los océanos, el camino para proteger los arrecifes de coral es claro: reducir las emisiones. “Hay muchas razones para la desaparición de los arrecifes de coral, pero no nos andemos con rodeos”, dijo en un comunicado. “Si queremos que los arrecifes de coral sobrevivan, debemos reducir drásticamente nuestras emisiones y mantener el calentamiento global por debajo de 1.5 °C (2.7 °F)”.

Imagen de cabecera: blanqueo de corales en Ningaloo, Australia, en febrero de 2025. Foto: cortesía de Daniel Nicholson / Ocean Image Bank
Esta nota se publicó originalmente en inglés en el sitio de Mongabay el 23 de abril de 2025.